Los empresarios de Carolina del Norte confían en que se mantengan los recortes fiscales 

Gerardo Lora. Subdirector de operaciones de base de la Iniciativa LIBRE-Carolina del Norte

Si pudiera señalar una pieza específica de legislación que ha ayudado a las familias latinas en Carolina del Norte más que cualquier otra en la última década, sería la Ley de Recortes de Impuestos y Empleos (TCJA, por sus siglas en inglés) de 2017. Estos recortes de impuestos de Trump redujeron las cargas fiscales corporativas e individuales, fomentaron el crecimiento del empleo y apoyaron a las pequeñas empresas.

El impacto en las familias y empresarios hispanos de Carolina del Norte, que contribuyen con más de 48.000 millones de dólares al crecimiento económico de Carolina del Norte, ha sido enorme.

Los recortes fiscales de Trump nos ayudaron a lograr una mayor seguridad financiera y éxito empresarial. Ahora casi 1 de cada 4 nuevas empresas en Carolina del Norte es de propiedad latina.

Si el Gran y Hermoso Proyecto de Ley de Trump no es aprobado por el Senado, esos recortes fiscales vitales expirarán con él. Eso no son solo malas noticias para la comunidad latina de Carolina del Norte, son malas noticias para cada uno de nosotros. 

Lo que está en juego para Carolina del Norte

La expiración de estos recortes fiscales favorables al crecimiento costaría a nuestro estado más de 24.000 puestos de trabajo. Individualmente, nuestras empresas locales de Carolina del Norte verían aumentados sus impuestos en casi 1.000 dólares. Las familias verían su deducción estándar reducida de nuevo a los niveles anteriores a 2017, y sus impuestos aumentarían un promedio de más de 2.000 dólares al año.

Los ciudadanos de Carolina del Norte no pueden permitirse la mayor subida de impuestos de la historia de Estados Unidos. Tomemos como ejemplo a Angélica Betancourt, propietaria de una pequeña empresa. Los recortes fiscales de Trump en 2017 le dieron el impulso que necesitaba para hacer realidad su sueño de tener un restaurante. Ahora, con el aumento de impuestos en ciernes, Angélica espera que sus sueños no se derrumben con él.

El fin de los recortes fiscales de Trump en 2017 pondría en peligro los planes de Angélica de convertir su carrito de comida en un local físico. Tendría que subir los precios, reducir personal y ajustar su presupuesto para comprar nuevos equipos. En el sector alimentario, los costes ya son altos, los márgenes de beneficio escasos y la competencia feroz. Angélica tendría que luchar por la supervivencia de su negocio.

No es la única que teme que aumenten los impuestos si no se aprueba el proyecto de ley Big Beautiful.

Si el Congreso no consigue llevar el proyecto de ley a la mesa del presidente Trump, podría suponer una subida de impuestos para más del 70% de estos negocios latinos como el de Angélica. Con tales aumentos de impuestos generalizados en ciernes, no es de extrañar que el 90% de los votantes latinos se opongan a los aumentos de impuestos y quieran mantener sus tasas actuales.

Muchas familias hispanas y empresarios de Carolina del Norte atribuyen a los recortes fiscales el haberles ayudado a lograr una mayor seguridad financiera y éxito empresarial. Los recortes fiscales crearon un respiro fundamental para los empresarios al reducir las cargas fiscales, incentivar la inversión y permitir la reinversión en las comunidades locales.

Congreso: Aprobar el proyecto de ley One Big Beautifull

El Congreso debe aprobar el Gran y Hermoso Proyecto de Ley para mantener vivos los recortes de impuestos de Trump de los que dependen tantas familias y empresarios en Carolina del Norte, y tantos millones más en todo el país.

Como pueden atestiguar estas familias y empresarios, el gasto también es un problema. Los miembros del Congreso tienen mucho trabajo por delante para contener el gasto y llevarlo a un nivel más responsable que proteja la prosperidad futura del país. Es un objetivo necesario y noble.

Pero creo que los recortes del gasto pueden producirse a la vez que se asegura el nivel actual de recortes fiscales. El contribuyente estadounidense no debería ver ningún tipo de subida de impuestos mientras haya mucho gasto que recortar.

El primer paquete de rescisión, aprobado por la Cámara de Representantes la semana pasada, promete ahorrar 9.400 millones de dólares del presupuesto federal cancelando fondos que ya han sido asignados por el Congreso. Es un gran primer paso para recortar el gasto sin aumentar los impuestos aquí en Carolina del Norte.

Es posible reducir nuestro gasto federal y mantener también los recortes fiscales de 2017. De hecho, es imperativo que lo hagamos, para que el pueblo estadounidense pueda prosperar y las empresas de Carolina del Norte puedan crecer.

Si el Congreso no consigue garantizar los recortes fiscales, las familias y las pequeñas empresas pagarán el precio, literalmente.